Capturando la esencia de los niños:
Sesiones fotográficas divertidas y auténticas

Creando un ambiente divertido y relajado
A menudo me encuentro con madres preocupadas porque sus hijos se resisten a posar para las fotos. Si tu hijo no quiere hacerse fotos, y esto resulta todo un desafío para ti, créeme que entiendo perfectamente tu situación. Aquí te dejo unos pequeños tips o consejos para conseguir tener hermosos recuerdos de ellos.

En primer lugar, las sesiones de fotos deben ser divertidas y emocionantes. Debes dejar de pensar que van posar para ti sin más y permitirles interactuar con objetos que despierten su interés, de esta forma, lograrás capturar imágenes espontáneas, llenas de frescura y ocurrencias. Estos momentos son los más hermosos y merecen ser recordados, como ese gesto que siempre hacen cuando están alegres, cuando hacen travesuras y cuando se divierten al máximo.
La principal razón por la que posiblemente tu hijo no quiere hacerse fotos es porque le “obligas” a sonreir o a estarse quieto, pero debes pensar que esto también lo podemos conseguir de otras formas, sin que se den cuenta.

Estableciendo una conexión mágica
Otra excelente manera de hacer que los niños se sientan cómodos, es animándolos a compartir cosas divertidas, como sus travesuras, hablar sobre sus amigos, su familia, sus mascotas, sus ilusiones y cómo disfrutan en el colegio. Al hacerlo, lograrás establecer una conexión mágica con los más pequeños, permitiéndote fotografiarlos de manera natural, sin que estén tan pendientes de los disparos de la cámara. ¡El resultado será una auténtica sorpresa!

Conociéndonos antes de la sesión
Como fotógrafa de Artefomedina me gusta conocer a mis modelitos a través de juegos y bromas y, en la mayoría de las ocasiones, me sirve bastante bien. En definitiva, es comportarse como un niño y tratarlos desde su misma forma de pensar. Trabajar con niños te tiene que gustar mucho mucho, tener mucha paciencia y respeto por los pequeños, darles su espacio y tomarte tu tiempo, para que la sesión sea todo un éxito.

En resumen
Al establecer ese vínculo cercano y crear un ambiente divertido, los niños colaboran y disfrutan al máximo durante su sesión fotográfica, convirtiéndola en un día especial para ellos y un maravilloso recuerdo para sus padres. Como fotógrafa, es maravilloso trabajar con niños y ver cómo las mamás quedan encantadas con los resultados.
Recuerda que cada niño es único y especial, y capturar su esencia y alegría en cada imagen es un privilegio. Siempre es gratificante ver cómo los momentos mágicos se transforman en recuerdos duraderos.
Si aún así tu hijo no quieres hacerse fotos
Siempre tienes la posibilidad de contratar a un profesional acostumbrado a lidiar con este tipo de situaciones. En Artefotomedina capturamos la esencia de tu pequeño tesoro. Llámanos, estaremos encantados de crear para ti recuerdos imborrables.
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